Cada 30 de agosto se conmemora el Día de Santa Rosa de Lima, la primera mujer sudamericana en ser canonizada y a quien se considerada patrona de América. Con esta celebración, muchos esperan la tradicional tormenta de Santa Rosa y su origen despierta mucha curiosidad en los argentinos.
Alerta meteorológica: ¿a qué provincias podría llegar la tormenta de Santa Rosa?Isabel Flores de Oliva, llamada Rosa por su madre debido a su belleza, fue una santa católica que perteneció a la orden de los dominicos. Se retiró a temprana edad a una vida de oración y penitencia: hizo una pequeña ermita en su casa, donde solía rezar por los necesitados y aquellos en busca de redención. Su entrega a la vida religiosa y sus actos de bondad trascendieron el Perú y llegaron a otros países.
Tanto fue así que el Papa Clemente X la canonizó en el año 1671, nombrándola como “Principal Patrona del Nuevo Mundo” (en ese momento América), Filipinas e Indias Occidentales. Entre los santos nacidos en el continente americano, Santa Rosa de Lima fue la primera en recibir el reconocimiento canónico de la Iglesia Católica.
El origen de la Tormenta de Santa Rosa
En 1615, buques neerlandeses se acercan y desembarcan en el puerto del Callao, con la decisión de atacar Lima. Cuando llega la noticia a la ciudad, Rosa reúne a las mujeres de Lima en la Iglesia de Nuestra Señora del Rosario para orar por la salvación de la ciudad. Subió al altar de la iglesia y puso su cuerpo para defender a Cristo, en medio de huídas de los limeños. Días después, el capitán de la flota holandesa fallece misteriosamente en su barco, lo cual llevó a la retirada de las naves.
En Lima, todos atribuyeron el milagro a Rosa, y por ello se la representa portando a la ciudad sostenida por un ancla. Por otro lado, la leyenda dice que Santa Rosa habría conjurado una tormenta a través de sus oraciones. De acuerdo a la tradición, la lluvia torrencial impidió el ataque de los piratas a la capital peruana.
Desde entonces, se conecta la fecha de su festividad, el 30 de agosto, con la llegada de intensas lluvias a la región. Sin embargo, los relevamientos año a año no coinciden con esta característica en Argentina.